“El mundo indígena americano ofrece una enorme variedad de formas sociales y culturales que representan niveles muy distintos en el proceso de evolución social. (...) Los españoles distinguieron claramente los grados de desarrollo sociocultural que encontraron entre los indígenas. Describían como pueblos que vivían “en policía” a cuantos ocupaban asentamientos permanentes bajo un régimen de gobierno claramente institucionalizado. Corresponden a grandes rasgos a las sociedades de Mesoamérica y de la zona andina que clasificaremos como civilizaciones. En estas regiones, muy pobladas y con sistemas agrícolas avanzados, se establecieron los centros del dominio español basándose en los recursos ya desarrollados por la población indígena que pasó ella misma a ser parte esencial de la sociedad colonial. En cambio, los pueblos dedicados a la caza y recolección de productos silvestres, formaban grupos de población escasa, frecuentemente nómadas. (...) Son sociedades tribales o igualitarias. (...) La desigualdad social se limita a diferencias de sexo, edad y capacidad individual. Estas sociedades son también igualitarias en lo político. No hay individuos que ejerzan permanentemente la autoridad. (...) Los cacicazgos constituyen un nivel intermedio entre las sociedades más primitivas con un mínimo de diferenciación social y las sociedades civilizadas con clases sociales y el estado. Por lo general se trata de grupos con agricultura bien desarrollada. El cacique es quien dirige al grupo en su conjunto. (...) En funciones de gobierno actúa como cabeza del grupo en actividades guerreras, en la resolución de conflictos y en el ceremonial. (...) La diferenciación social en sociedades de este tipo distingue junto al cacique a su séquito o corte, miembros de su hogar (...)La gran masa de la población forma el común. Los tres niveles socioculturales definidos estaban representados en el continente en el momento del descubrimiento. Se puede decir que la naturaleza de las sociedades indígenas antecedentes condicionó tanto las experiencias del primer contacto como los rasgos fundamentales de las sociedades que se desarrollado después bajo dominio europeo.
Texto extraído y adaptado de “Historia de América Latina I”. P. Carrasco y G. Céspedes. Editorial Alianza, Madrid, 1985, pp. 12-25.
América indígena.
ResponderEliminar“El mundo indígena americano ofrece una enorme variedad de formas sociales y culturales que representan niveles muy distintos en el proceso de evolución social. (...) Los españoles distinguieron claramente los grados de desarrollo sociocultural que encontraron entre los indígenas. Describían como pueblos que vivían “en policía” a cuantos ocupaban asentamientos permanentes bajo un régimen de gobierno claramente institucionalizado. Corresponden a grandes rasgos a las sociedades de Mesoamérica y de la zona andina que clasificaremos como civilizaciones. En estas regiones, muy pobladas y con sistemas agrícolas avanzados, se establecieron los centros del dominio español basándose en los recursos ya desarrollados por la población indígena que pasó ella misma a ser parte esencial de la sociedad colonial.
En cambio, los pueblos dedicados a la caza y recolección de productos silvestres, formaban grupos de población escasa, frecuentemente nómadas. (...) Son sociedades tribales o igualitarias. (...) La desigualdad social se limita a diferencias de sexo, edad y capacidad individual. Estas sociedades son también igualitarias en lo político. No hay individuos que ejerzan permanentemente la autoridad. (...)
Los cacicazgos constituyen un nivel intermedio entre las sociedades más primitivas con un mínimo de diferenciación social y las sociedades civilizadas con clases sociales y el estado. Por lo general se trata de grupos con agricultura bien desarrollada. El cacique es quien dirige al grupo en su conjunto. (...) En funciones de gobierno actúa como cabeza del grupo en actividades guerreras, en la resolución de conflictos y en el ceremonial. (...) La diferenciación social en sociedades de este tipo distingue junto al cacique a su séquito o corte, miembros de su hogar (...)La gran masa de la población forma el común.
Los tres niveles socioculturales definidos estaban representados en el continente en el momento del descubrimiento. Se puede decir que la naturaleza de las sociedades indígenas antecedentes condicionó tanto las experiencias del primer contacto como los rasgos fundamentales de las sociedades que se desarrollado después bajo dominio europeo.
Texto extraído y adaptado de “Historia de América Latina I”. P. Carrasco y G. Céspedes. Editorial Alianza, Madrid, 1985, pp. 12-25.